Desde hace años, España y el resto de países de las Naciones Unidas están apostando para que el mayor número de productos, bienes y servicios sean accesibles. Este propósito también incluye las manifestaciones artísticas, los programas educativos y los eventos culturales.
Por tanto, el incremento de producciones con audiodescripción, subtitulado y lengua de signos ya es una realidad.